Quinta San Cayetano es mucho más que una casa rural, es una experiencia para los amantes de los placeres sencillos y
relajados de la vida rural, de la naturaleza y de la buena mesa. Situada a apenas
3 kilómetros de la localidad abulense de Candeleda y a menos de dos horas de
Madrid, esta casa de campo ecológica rodeada de un bosque de 6 hectáreas de
robles, enebros y olivos nos ofrece esa
desconexión total y esas experiencias en contacto directo con la naturaleza que
los urbanitas tanto agradecemos.
Mía Hurtado de Mendoza y Alberto Muñoz son el joven matrimonio de emprendedores
y profesionales del campo inmobiliario que han creado este paraíso en el corazón del Valle del Tiétar, con increíbles vistas al
pantano de El Rosarito y al Pico Almanzor. Una pareja de burritos, Carmelo
y Carmela, -que ya han formado su propia familia con la pequeña Margarita-, te
darán la bienvenida a esta casa que dispone de cinco enormes habitaciones-suites,
un impresionante y acogedor salón-comedor, piscina de agua salada, un porche
chill-out y un huerto ecológico en el que se cultivan deliciosas verduras y
frutas de temporada. Tiene capacidad para 14 personas y, de momento, se alquila
la casa completa, ofreciendo una
atención personalizada y servicio cinco estrellas en el que no echarás de menos
ninguna comodidad, ya que incluye limpieza diaria y servicio de desayuno
además de comidas y cenas a elegir.
Y es que los clientes
de Quinta San Cayetano pueden disfrutar de una experiencia gastronómica basada
en la filosofía “slow” que impregna todo el proyecto, una cocina responsable que
busca la felicidad hecha de cosas simples y auténticas, productos frescos,
naturales y autóctonos elaborados con todo el cariño, el llamado “kilómetro
cero” en toda su esencia impregna una seleccionada carta con alma propia.
Puedes comenzar tomando un refrescante aperitivo en el porche con vistas al
pantano El Rosarito, una tabla de quesos y embutidos ibéricos con colines,
panecillos, aceitunas y un poquito de fruta, mientras se va haciendo lentamente en un horno de barro o de leña un
buen cochinillo, cordero o cabrito, que se acompañará de una suculenta
ensalada de verduras del huerto ecológico que tú mismo puedes cortar.
Apetecibles coquelets camperos en rotisserie o en
cazuela de hierro fundido acompañados de
patatas panadera y verduras asadas en
ese horno de barro puede ser una buenísima opción para reunirse en torno a
la espectacular mesa que preside el comedor. Guisos bajo encargo como el arroz
caldoso de pollo campero, migas del cazador o cocido en cazuela de barro
sobre la lumbre, además de pisto
casero y huevos fritos con patatas procedentes de gallinas criadas en libertad
con una alimentación natural son otras apetecibles opciones para armonizar con alguno de los vinos
seleccionados por Quinta San Cayetano.
La experiencia “slow food” se completa por la mañana con
un atractivo desayuno que invita a quedarse contemplando el Pico Almanzor a
través de los enormes ventanales de la casa: zumos
naturales recién hechos, irresistible bizcocho casero, croissants recién salidos
del horno, pan tostado acompañado de mantequilla y mermeladas caseras y café de
puchero que te hacen sentir como en casa compartiendo charla sin ninguna prisa.
Mía se ha encargado
personalmente del diseño e interiorismo de la casa, siempre teniendo presente
la filosofía eco-friendly y el buen gusto y profesión que le otorga su
formación en la Escuela Internacional de Dirección Hotelera Les Roches Marbella y su experiencia en
el sector inmobiliario de lujo y en hoteles cinco estrellas como el Villa Magna
y el Wellington madrileños. Colores
claros y luminosos, detalles que recuerdan a esas masías rurales de Ibiza y
Formentera, baños de baldosas hidráulicas pintadas a mano una a una y traídas
directamente desde Marruecos, tapicerías
personalizadas en los cabeceros de las camas y en los sofás, y unas
chimeneas que cautivan cuando se encienden tras una jornada en el campo crean
una atmósfera mágica.
Y tras contemplar todas las estrellas del cielo tumbado
sobre las camas que rodean la piscina escuchando la música de un equipo de sonido inalámbrico que se controla desde el
móvil, déjate envolver por las suaves sábanas de algodón egipcio de las enormes
camas para sumergirte en el silencio del bosque.
El paisajismo ha
corrido a cargo de Nena Malo, diseñando una zona ajardinada que convierte a
Quinta San Cayetano en el lugar ideal para celebrar todo tipo de eventos en amplias zonas verdes con unas vistas irrepetibles. En un entorno natural único, Quinta San
Cayetano diseña un plan personalizado de actividades para disfrutar de la
naturaleza, como senderismo, paseos a caballo, rutas en bici, piragüismo,
caza y pesca, golf o yoga y pilates.
El carácter emprendedor
del matrimonio es imparable y ya están dando forma a un nuevo proyecto dentro
de La Quinta, la construcción de un pequeño y coqueto hotel junto
a tipis a modo de bungalows, el spa que ya está casi terminado, clases de yoga
la elaboración de su propio aceite, …. Un
servicio exquisito en un entorno de calma y buen gusto, un acierto seguro. Hacedme
caso, escapaos de la ciudad para disfrutar del lujo de la tranquilidad, la vida
pausada, lo auténtico y la cercanía de la naturaleza.
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